Debido a los pueblos germánicos y sus incursiones, la Iglesia Occidental entró en un periodo de caos y oscuridad. Justo González llama correctamente a esta época “la era de las tinieblas”. Entonces, ¿cómo afectaron las invasiones bárbaras a la Iglesia?
- Las lenguas romances: Después de cierto tiempo, la mayoría de estos pueblos bárbaros olvidó sus lenguas natales y comenzaron a hablar (mal o bien) el latín. Este factor, entre otros más, dieron como resultado el origen de nuestras lenguas romances modernas como el español, francés, e italiano.
- Culto cristiano: Debido a que eran tiempos de dolor, muerte y desorden en el Imperio Occidental por causa de las invasiones, el culto cristiano, comenzó a preocuparse cada vez más por temas como la muerte, el pecado y el arrepentimiento olvidando el glorioso evento de la victoria de Jesús en su resurrección. Incluso, la Cena del Señor, que hasta entonces había sido una celebración, se convirtió en un servicio triste en el que se pensaba más en los propios pecados que en el gozo del perdón y la victoria de Jesucristo.
- Arrianismo y paganismo: Los bárbaros reintrodujeron en la Europa occidental dos elementos que afectaron a la Iglesia por un tiempo, estos fueron el arrianismo y el paganismo.
- Casi todos los invasores eran arrianos: los vándalos, los visigodos, los suevos, los ostrogodos, los borgoñones y los lombardos. A la larga, todos estos pueblos o bien desaparecieron (los vándalos y los ostrogodos), o bien se hicieron cristianos (los suevos, los visigodos y los borgoñones). En cuanto a los pueblos paganos, a la postre ellos también se hicieron cristianos.
- Algunas de estas conversiones fueron el resultado de la presión que ejercía algún pueblo vecino. Pero en su mayor parte fueron sencillamente el resultado del proceso de asimilación que tuvo lugar tras las invasiones. Los bárbaros abandonaron sus viejas creencias y acabaron por aceptar las de los pueblos conquistados. En todo este proceso, hubo dos movimientos en la vida de la Iglesia que se destacaron por su importancia en la conversión de los bárbaros, en la preservación de la cultura antigua y en la estabilidad de la Iglesia. Estos fueron el monaquismo y el papado.
- El monaquismo: La gran figura del monaquismo occidental fue Benito de Nursia, quien creó la comunidad de Montecasino, y en el año 529 d.C. estableció una Regla que marcaría pauta para todo el monaquismo occidental.
- Entre los principios de vida que promovía esta Regla se encontraban el trabajo físico, los votos de obediencia, castidad, pobreza y de permanencia y la práctica de reunirse ocho veces al día para orar y leer la Biblia como también otros libros. A estos periodos de tiempo se les llamó vigilias.
- Debido a esta Regla los monjes benedictinos también le devolvieron al trabajo la dignidad que había perdido entre las clases más refinadas. En otras palabras, los ricos pensaban que el trabajo físico debía quedar reservado para las clases bajas, que supuestamente eran ignorantes e incapaces de elevarse al nivel de los ricos, los monjes, muchos de ellos provenientes de familias ricas, le mostraron al mundo la posibilidad de combinar la más rigurosa vida religiosa e intelectual con el trabajo físico.
- Pronto el monaquismo benedictino se extendió por toda Europa occidental. Eventualmente, y por diversas circunstancias, los monasterios benedictinos se volvieron centros de estudio donde se copiaban y conservaban manuscritos y en escuelas en las que los niños dedicados a la vida monástica por sus padres, aprendían sus primeras letras. Pronto las escuelas monásticas fueron prácticamente las únicas que hubo en Europa occidental, y los monjes se volvieron los maestros de todo un continente. Por último, los monasterios se convirtieron en centros misioneros.
- El papado: Este fue el otro pilar que trajo cierta estabilidad a la Iglesia durante este tiempo de caos. Ahora bien, el término “papa”, que hoy se emplea por la iglesia Católica Romana para referirse exclusivamente al obispo de Roma, no siempre tuvo ese sentido. El título en sí sólo significa “papá”, y era un término de cariño y respeto hacia los obispos. En la época antigua, se le aplicaba a cualquier obispo distinguido, sin importar si era o no obispo de Roma. ¿Dónde ocurrió el cambio? ¿Por qué llegó el papa de Roma a tener tanta autoridad?
- Cuando los bárbaros invadieron el Imperio, la Iglesia de Occidente comenzó a seguir un curso muy distinto de la de Oriente. En el Occidente, el Imperio desapareció, sin embargo, la Iglesia vino a ser como un guardián de la antigua cultura romana, es decir, fue la institución de la Iglesia la que preservó algo de la vieja civilización romana. Por lo tanto, era evidente que el obispo o papa de dicha Iglesia llegara a tener gran prestigio y autoridad. Fue desde entonces que el término papa se reservó exclusivamente para el obispo de Roma.
- Algunos de los papas más importantes fueron:
- León el Grande (440–461 d.C.) quien intervino en las controversias cristológicas que tuvieron lugar en el Oriente de habla griega y fue quien de algún modo inexplicable detuvo el avance de Atila frente a Roma.
- Gregorio el Grande (590–604 d.C.) se destacó por sus habilidades administrativas. Además de ocuparse de la salud y alimentación de la población de Roma, intervino en España apoyando a Recaredo en su intento de convertir el país a la ortodoxia. Fue él quien se ocupó de la difusión del monaquismo benedictino. Además, escribió profusamente, y fue principalmente a través de sus escritos que buena parte de la Edad Media leyó e interpretó la teología de Agustín de Hipona.
- Los sucesores de Gregorio tuvieron conflictos tanto con los lombardos como con los emperadores cristianos de Oriente, y por ello se fueron acercando cada vez más a los francos. Por fin, en el año 800 d.C., el papa León III coronó a Carlomagno, rey de los francos, como Emperador. De este modo, al menos en teoría, quedaba restaurado el viejo Imperio Romano de Occidente. Pronto, sin embargo, el papado volvió a caer en franca decadencia. El breve renacimiento carolingio había pasado, y el papado se volvió juguete de las ambiciones de poderosas familias romanas. Varios papas murieron asesinados, quizá por quienes les sucedieron. A veces hubo más de un presunto papa. Hasta un niño de quince años llegó a ocupar el papado. No fue sino hacia fines de este período, alrededor de la persona de Hildebrando conocido como el papa Gregorio VII que el papado se reformó.
Cómo se puede observar, las invasiones germánicas fueron, bajo la providencia de Dios, un instrumento que trajo y ayudó a traer importantes cambios a la Iglesia Occidental.
Referencias
González, J.L. (2003) Historia del Cristianismo: Tomo 1. Miami, FL: Editorial Unilit
González, J. L. (1995). Bosquejo de historia de la iglesia. Decatur, GA: Asociación para la Educación Teológica Hispana.